Entrevista a la artista visual y creadora de <a href="https://www.lacupula.ar/">La C&uacute;pula</a>.

Anita Gil es artista visual y directora creativa de <a href="https://www.lacupula.ar/">La C&uacute;pula</a>, una curadur&iacute;a sensible de objetos, muebles, esculturas, cuadros: &ldquo;Aqu&iacute; est&aacute; todo lo que me gusta, me emociona, me inspira. Son hallazgos. Piezas sin tiempo, objetos &uacute;nicos&rdquo;, escribe. En su cuenta de Instagram comparte postales de su universo creativo que encapsula su fotograf&iacute;a, sus hallazgos est&eacute;ticos en La C&uacute;pula y una vida dom&eacute;stica consciente e inspiradora: &ldquo;Quiero buscar. En mi vida, en mi arte, en La C&uacute;pula, todo se interconecta. Por eso estoy tan divertida y tan feliz: hago todo eso desde un mismo lugar&rdquo; cuenta Anita, que en conversaci&oacute;n con L&rsquo;Officiel, nos abre una puerta a su mundo de rituales, hallazgos y belleza.
L&rsquo;OFFICIEL: &iquest;Cu&aacute;l es tu primer recuerdo de ser creativa?
ANITA GIL: De chica filmaba fotos. Mi pap&aacute; era muy fan de las diapositivas. Yo ten&iacute;a la filmadora, por otro lado le pon&iacute;a la m&uacute;sica. Eran como diarios visuales, reels anal&oacute;gicos. Hacia mis pel&iacute;culas. Todo muy casero. Tambi&eacute;n hac&iacute;a collage con papeles, revistas, palabras. Todo mi universo creativo viene desde ese tiempo. La m&uacute;sica del tocadiscos y el piano de mi padre, su pasi&oacute;n por la fotograf&iacute;a, el arte y pinturas de mi t&iacute;a pintora con su taller en el Soho en Nueva York, mi t&iacute;o m&uacute;sico, compositor y escritor, mi abuelo paterno un intelectual gran lector de quien hered&eacute; toda su biblioteca de cl&aacute;sicos, mi madre, una esteta de gusto exquisito. En casa siempre hubo una gran sensibilidad y as&iacute; me crie rodeada de todas las disciplinas. La m&uacute;sica, la pintura, la fotograf&iacute;a, la literatura.&nbsp;
L&rsquo;O: &iquest;Ten&eacute;s tus propios principios o reglas para crear o sos m&aacute;s intuitiva?
A.G: A la hora de crear mi gran referente es la poes&iacute;a. La poes&iacute;a trabaja con la intuici&oacute;n m&aacute;s elevada, no se explica, es misterio, enigma. Mis fotograf&iacute;as son &iacute;ntimas, silenciosas, con vac&iacute;os inmensos y detalles muy sutiles. En mi arte no est&aacute; todo expuesto: trabajo con el desenfoque, con lo velado, juego con lo difuso como cuando una acuarela se expande en el papel y se abre. Quiero que mi fotograf&iacute;a est&eacute; rota, imperfecta. Yo me gu&iacute;o mucho por las palabras: la nostalgia, lo velado, lo roto, lo que no se ve. Lo que no se ve me importa mucho m&aacute;s que lo que se ve. Quiero que cuando alguien vea mis fotos, se les mueva algo. Como dec&iacute;a Clarice Lispector en Agua Viva: &ldquo;busco la cuarta dimensi&oacute;n de esta vida&rdquo;. Cuando le&iacute; eso me reson&oacute; much&iacute;simo porque yo toda la vida busqu&eacute; esa dimensi&oacute;n.
L&rsquo;O: &iquest;Qu&eacute; hace que una casa sea un hogar?
A.G: Mi casa es mi estudio, mi estudio es mi casa. Ac&aacute; no hay reglas, ac&aacute; se vive desde otro lugar, desde el lugar del hacer, del crear. No de decorar. Mi casa es el microcosmos desde donde sale todo mi arte. Y tambi&eacute;n de aqu&iacute; sale mi nuevo proyecto La C&uacute;pula, mi espacio de curadur&iacute;a, desde donde sale toda esa belleza plasmada en objetos, arte y piezas &uacute;nicas que me interpelan desde un lugar &uacute;nico: la emoci&oacute;n. Desde la C&uacute;pula intento promover un consumo m&aacute;s consciente, que trascienda a las modas y tendencias. Sin mandatos. No me interesa pensar en t&eacute;rminos de las tendencias, de &ldquo;lo que se viene&rdquo;. A veces me preguntan &ldquo;&iquest;se puede poner la alfombra ac&aacute;?&rdquo;, o &iquest;&ldquo;a cu&aacute;ntos metros hay que&hellip;?&rdquo; Son preguntas que no s&eacute; responder. Yo me gu&iacute;o por la intuici&oacute;n, por la emoci&oacute;n.&nbsp;
L&rsquo;O: Sabemos que sos muy adepta a los rituales. &iquest;Incorporaste alguno nuevo?
A.G: No incorpor&eacute; ning&uacute;n nuevo ritual porque &iexcl;tengo tantos! (risas). No soy una persona estructurada en general, pero con los rituales soy estructurada. Porque me doy cuenta que me hacen bien y por eso me los respeto mucho. Me bajan a tierra. Los rituales en general te llevan a estar sola, yo tengo muchos hijos, marido, entonces esa b&uacute;squeda me obliga a encontrar momentos de soledad. La ma&ntilde;ana es un momento clave para empezar con mi primer ritual. La preparaci&oacute;n del caf&eacute; y la lectura de poes&iacute;a, o alguna lectura pendiente. Ahora lo estoy leyendo a Humboldt porque me apasiona su locura y sus ganas de expedicionar el mundo. Tambi&eacute;n estoy leyendo un libro sobre alimentaci&oacute;n y pienso que me gustar&iacute;a tener una huerta, un ritual conectando con la naturaleza. Es un proyecto de ritual.&nbsp;&nbsp;
L&rsquo;O: Lo ponemos en la nota para que tengas que cumplirlo. Es aspiracional (risas)
AG: Ojal&aacute;, s&iacute;, me encantar&iacute;a.&nbsp;
L&rsquo;O: A la hora de componer un relato visual, &iquest;cu&aacute;les son los elementos que trabajas?
A.G: A trav&eacute;s de mis fotograf&iacute;as intento expresar la vida &iacute;ntima, la vida bella, tambi&eacute;n evoco el silencio y el ritmo de la naturaleza. Son como haikus visuales retratados solo con luz natural, nunca artificial, siempre entre haces de luces y huecos de las sombras. Retrato objetos de arte, plantas, texturas, frutas, instantes vividos, detalles, personas, siempre queriendo mostrar una forma de vida, la m&aacute;s lenta, la m&aacute;s simple, sin estridencias.
L&rsquo;O: Un libro que te haya inspirado en el &uacute;ltimo tiempo&nbsp;
A.G: Una gu&iacute;a sobre el arte de perderse, de Rebecca Solnit. Es para tenerlo de biblia: me encant&oacute;.&nbsp;
L&rsquo;O: La naturaleza a veces produce colores que no llegan a la foto. &iquest;Record&aacute;s alg&uacute;n color-r&aacute;faga que te hubiera gustado capturar?
A.G: Yo creo que m&aacute;s que color es ese &aacute;tomo de tiempo del que habla Clarice [Lispector]. &ldquo;Quiero poseer los &aacute;tomos del tiempo&rdquo;, dice ella. &iquest;Y en la foto qu&eacute; agarr&aacute;s? El instante que est&aacute; ac&aacute;. Es el color del presente, de la hora. &iquest;Qui&eacute;n puede atrapar ese instante con un nombre? Ah&iacute; volvemos a la poes&iacute;a, s&oacute;lo la poes&iacute;a puede pensar as&iacute; y la poes&iacute;a no se puede explicar. Ese color es el color de la hora. Es lo &uacute;nico que ten&eacute;s en ese momento, lo pod&eacute;s registrar pero no lo nombr&aacute;s con la foto, despu&eacute;s est&aacute; la persona que lo va a ver y puede decir &ldquo;es el color de la hora&rdquo;, &ldquo;es el color de la vida&rdquo; &ldquo;es el color de la fruta&rdquo;. Est&aacute; en cada uno ponerle nombre.
L&rsquo;O: Un proyecto en el horizonte que te entusiasme
A.G: Tengo en mente hacer una muestra para exponer mi arte. Estoy pensando en el t&iacute;tulo. Le dedico mucho tiempo a cada detalle, por eso soy muy lenta. Voy eligiendo cada uno de los elementos: imprim&iacute; las fotos chiquitas, en papel de algod&oacute;n. Me interesa trabajar con la dimensi&oacute;n sensorial del arte. Tambi&eacute;n estoy pensando incorporar textos. Me gusta mucho leer y escribir, me gusta mucho la imagen: quiero combinar todo. Quiero que la gente sea tan feliz yendo a ver mi muestra como fui yo cuando la hice, que salga con la sensibilidad explotada. Otro de mis proyectos es trabajar mucho para que La C&uacute;pula crezca cada d&iacute;a un poquito m&aacute;s, ir descubriendo nuevos hallazgos: si hay una cosa que amo es hallar.&nbsp;&nbsp;

Cinco minutos con Anita Gil

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