¿La locación? Museo Rodin. La escenografía fue diseñada por la artista Bianca Pucciarelli Menna, también conocida como Tomaso Binga, seudónimo masculino que utiliza para parodiar los privilegios reservados para los hombres. Las paredes del lugar se transformaron así en un alfabeto gigante en el cual cada caracter estaba representado por un cuerpo desnudo.

¿La inspiración? Las Teddy Girls, la contraparte femenina de los Teddy Boys, una de las primeras tribus urbanas inglesas durante la década de los 50s. En esta colección, Maria Grazia Chiuri retoma algunas prendas del archivo Dior reinterpretando así el bob hat y la clásica chaqueta de cuero negra. A estas se sumaron distinas remeras con slogans feministas que celebran el concepto de sororidad y aluden a las obras literarias de la escritora Robin Morgan.